Batallas ganadas y batallas que aun quedan por ganar, la derrota no es un adversario digno ni de mirar.
Cada conflicto tiene una solución y poco a poco todo se pone en su sitio, lentamente, si quizás o creando estados alterados de una conciencia perdida tiempo atrás.
Una conciencia que nos grita actuar pero que nos preserva la integridad, aun teniendo solo ganas de gritar.
Una libertad dada a algunos como regalo, siempre esperando ser respetado, más aun solo de boquilla pues das y das y nunca recibirás.
Orgulloso he de estar fiel a mi soy, ¿lo eres tu?
Pensamientos confusos ocultos tras una sonrisa que todos saben poner, una simple palabra en el momento equivocado te puede desenmascarar, mas tonto no soy y ya la verdad se.
Aun que todos luchemos por causas nobles hay causas por las que seguir luchando aunque las palabras esgrimidas como espadas se pierda entre estocada y estocada.
Quizás haya un día en que no apetezca mas luchar, ¿cuanto tiempo se puede pelear contracorriente, cuanto dolor puede soportar un ser humano?
Son preguntas sin respuesta, mas prefiero ignorar la respuesta.
Y así dentro todos tenemos un héroe y todos tenemos un blasón por el que luchar.
Honestidad.
Lealtad.
Amistad.
Amor.
Cosas por las que luchar mientras quede aliento, cosas por las que sufrir hasta la muerte.
Y así un día mas nos levantamos y miramos al cielo, doloridos tras una batalla silenciosa librada en nuestro interior.
Así un día mas, miramos a la oscuridad y reímos por no llorar
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